El aislamiento de muros con poliuretano se muestra como una solución muy eficaz para mejorar la eficiencia energética de las edificaciones. Se consigue así un importante ahorro en el consumo de energía, por lo que se reduce el gasto en climatización, además de las emisiones contaminantes. Y, todo, logrando mayor confort en el interior de la vivienda.
¿Qué tipos de muros existen?
Según su función, pueden ser muros de contención, de carga y divisorios.
El muro de contención es una estructura que sirve de cerramiento, encargado de contener algún material, como pueden ser el suelo o el agua. Soporta empujes horizontales transmitidos por el terreno, y verticales, por los pilares o paredes de carga. Suele utilizarse hormigón armado para su construcción.
Por su parte, el muro de carga o portante, también denominado pared maestra, soporta elementos estructurales, de la misma forma que las vigas o los pilares.
El muro divisorio se emplea para dividir dos espacios, por lo que es ligero, al no tener que aguantar cargas del terreno. Además, puede aportar funciones aislantes e impermeabilizadoras a la construcción.
Por otro lado, los muros se pueden clasificar también según su colocación. Así encontraremos muro capuchino, al hilo, a tizón, combinado o doblado. Otra clasificación común es según el material empleado para su construcción.
¿Por qué es necesario el aislamiento de muros?
Porque a través de ellos es frecuente que se produzcan pérdidas de calor, humedades por condensación y la transmisión de ruidos molestos. El aislamiento termoacústico de los muros empleando poliuretano permite evitar estos problemas, eliminando puentes térmicos y acústicos con eficacia y amortiguando también las vibraciones que provocan las ondas de sonido.
¿Cómo se pueden aislar los muros?
Para el aislamiento de muros hay distintos sistemas en el mercado que garantizan la protección termoacústica. En la tabiquería de doble hoja se emplea con frecuencia poliestireno expandido, material presente también en el aislamiento perimetral de muros, dada su alta resistencia mecánica.
Para el aislamiento e impermeabilización de muros enterrados son una alternativa las planchas rígidas de poliestireno extruido. Esta opción, también muy usada en cubiertas, reduce la transmitancia térmica con eficacia. Otro tipo de aislamiento de muros son los paneles de lana mineral y de lana de vidrio, con funciones de aislamiento térmico y acústico.
Por su parte, el poliuretano es un material aislante con una muy baja conductividad térmica, que además protege de las humedades, previniendo la aparición de hongos. Y, gracias a su versatilidad, se ajusta a múltiples necesidades y elementos constructivos. Es muy resistente, ligero y de sencilla aplicación, con la que se conforma una capa continua sin juntas que tiene un efecto sellado, solucionando así fisuras y grietas. A esto hay que añadir que el poliuretano inyectado en cámara de aire contribuye a la estabilidad de la estructura dado que, por su gran adherencia, sirve para reforzar la unión entre las hojas del muro. En el caso del poliuretano proyectado, el grosor mínimo de la capa aislante permite contar con las mejores prestaciones del producto, por lo que es un sistema muy empleado en muros divisorios.