Una de las aplicaciones de poliuretano más complicadas por su procesamiento, así como por el diseño de la formulación, es la fabricación de espuma floral, una espuma rígida de poliuretano, moldeada y de celda abierta, especialmente pensada para arreglos florales (flores secas y artificiales) o naturales. Tras el tiempo necesario de curado, se puede cortar fácilmente en bloques del tamaño y forma deseados, que ofrecerán sus prestaciones de forma uniforme.
La espuma rígida de poliuretano destinada para las flores naturales tiene que ser lo suficientemente blanda para que el débil tallo de la flor natural penetre en la estructura de la espuma de poliuretano y al mismo tiempo lo suficientemente elástica para que cuando se clave el tallo de la flor quede bien agarrado y la flor no se suelte.
Por su parte, para arreglos florales con flores secas o artificiales, la espuma rígida de poliuretano aporta sujeción, flexibilidad y una sencilla manipulación. Se puede atravesar con mucha facilidad con el propio tallo y da excelentes resultados como base de plantas y flores que no necesitan agua. Este tipo de espuma está lista para usar y resulta muy versátil.
En Synthesia contamos con el producto Poliol 7646-M-21 / H-25C, una espuma floral moldeada de baja densidad, pensada para flores naturales. Por su parte, el Poliol 7645-M-27 / H-25C es espuma floral moldeada y de densidad media, que sirve como base para flores artificiales. Asimismo, el Poliol 7690 / H-25C son bloques de espuma floral de mayor densidad, para la producción de planchas florales.
Son sistemas que, si se tienen en cuenta las recomendaciones de seguridad, no presentan riesgos a la hora de su manipulación, si bien es aconsejable evitar el contacto con ojos y piel.
Estos productos de espuma rígida de poliuretano para moldeados florales están exentos de CFCs, HCFCs y HFCs, por lo que no dañan la capa de ozono ni contribuyen al calentamiento global. Es más, el Poliol 7646-M-21 / H-25C y el Poliol 7645-M-27 / H-25C contienen únicamente agua como agente espumante.
A esto se añade que el poliuretano es un material sostenible, porque genera muy pocas emisiones de CO2 en su producción. Además, es reciclable: con el reprocesamiento de restos de poliuretano se fabrica una espuma con la que se elaboran nuevos productos (aislamientos, material de embalaje, etc.).